sábado, 20 de agosto de 2011

REGRESO A LA RUTINA: SUPERA EL SÍNDROME POST VACACIONAL


Se terminaron las vacaciones y volvemos a la rutina. Regresamos a la oficina un poco diferente., tal vez un poco más triste. ¿Será que sufrimos del llamado síndrome post vacacional? Sí tu estado anímico está por el suelo al finalizar tus vacaciones, no eres el único. Según una encuesta internacional realizada por la empresa Randstad, 4 de cada 10 trabajadores se demora una semana en volver a rendir al 100% en sus actividades tras los asuetos; y 6 de cada 10 reconoce haber tenido problemas de ansiedad a su regreso.


Aunque este síndrome no es reconocido como una enfermedad, es un malestar que se caracteriza por fatiga, ansiedad, cansancio, insomnio, falta de concentración y alteraciones del apetito, por mencionar uno de los síntomas.

De hecho, afecta en mayor frecuencia a empleados entre los 25 y 40 años, en especial a aquellos que sienten frustración o incomodidad en su sitio laboral.
Existen muchas recomendaciones para superar este malestar, te traigo en el artículo de hoy un video con recomendaciones médicas que ofrece la empresa sanitas y un reportaje sobre este síndrome. Pero en líneas generales las recomendaciones son:


• No regreses el día anterior a empezar tu trabajo de vacaciones. Reajusta tu horario para que el retomar la rutina no sea tan terrible.

• Reparte tus vacaciones a lo largo del año. Sí solo la tienes una vez, te puedes pasar el tiempo pensando que ahora falta 11 meses para volver a tomarlas.

• Regresa al trabajo con una buena actitud y comienza tus labores gradualmente para volver al ritmo usual que tenías previo a tu descanso.

• Sí tanto te afecta volver un lunes, reincorpórate otro día para que el impacto sea menos leve.

Los expertos señalan que usualmente este síndrome dura 7 días, pero sí persiste entonces estaríamos hablando del síndrome de Bournout, por ejemplo. En este caso el trabajador está harto de su empleo y factores como el mal humor, la irritabilidad y la pérdida de la empatía con lo que se hace se transforma en algo cotidiano.